A Giulia la conocí en Eurodisney. Era la mejor Hotess del mundo. Consiguió un record en capacidad de gente en el Beaver Creek. Su organización a la hora de hacer reservas y distribuir a los clientes para cenar era sobrenatural.
Pero la hostelería no es lo suyo, así que ha vuelto a Italia y desde hace ya 5 años que se dedica a lo que le gusta: La TV
Trabaja con productoras, ha hecho telereportajes, y su meta es escribir guiones para series. Me ha prometido que se planteará lo de comenzar una sobre la vida de unos post-adolescentes que trabajan en el restaurante de un parque de atracciones. Los personajes no hace falta que se los invente, nos tiene a todos los del Beaver de modelos. Yo creo que sería un éxito. Me gustaría ver la actriz que haría mi papel, la española atontada e inocente que se enamora del barman polaco. La serie sería mondante, risas aseguradas.
Giulia ha estado en España de vacaciones con su novio Giuliano y ha venido a verme un día y medio. Ha sido visita relámpago porque nisiquiera he podido cogerme el día libre para estar con ellos, pero ha valido la pena, ya que las pocas horas que hemos estado juntas lo hemos aprovechado para ponernos al día de nuestras inquietudes y comeduras de cabeza.
Es como un puesto de habituallamiento en una carrera, la relación de amistad sigue en pie, corriendo a un buen ritmo, y de vez en cuando, un encuentro nos da de golpe más energía.
