viernes, 14 de julio de 2017

Redes sociales, mentiras y cintas de video.

Ayer sufrí un shock tremendo que me ha traumatizado y que me ha hecho sentirme muy mayor.

Para ponernos en situación tengo que explicar que hace tiempo me abrí un segundo instagram con la idea de publicar pequeñas historias cortas.

En cuanto abrí esta segunda cuenta, mis sobrinas de 14 y 17 años, adictas a los "likes" y al número de seguidores, formaron parte de mis contactos. 

Hace dos día comencé por fin a hacer  uso de esa segunda cuenta, y me dedico a entrar unas cuantas veces al día para ver si tengo algún seguidor nuevo.



Ayer, primer día del FIB, jueves 13 de Julio, mi sobrina Carla, la mayor, había colgado varias Historias en su perfil de instagram mostrando la entrada al recinto y un par de videos de los grupos tocando. Nada demasiado interesante. Ya que vivo muy cerquita de los conciertos, se me ocurrió mandarle un privado: "Si necesitas algo, me tienes a tiro de piedra"
Todo esto desde mi nueva cuenta de Instagram. 
Cuando vuelvo a mi cuenta habitual de lulabylula, cual es mi sorpresa cuando me doy cuenta de que... no puedo ver los videos. La pequeña capulla me había bloqueado para que no viera sus Historias, pero la muy cabeza de chorlito se había olvidado de bloquear también mi segunda cuenta. 

Que sensación más desagradable. ¿Desde cuando me he convertido en "el enemigo"?

Inmediatamente whattsapeo a mi hermano Gonso, y le pregunto si a él también le ha bloqueado. Efectivamente, tampoco puede ver los videos de Carla. Pero mi  hermano se muestra más comprensivo. 

-"Yo que pensaba que éramos los tíos guays"- le digo

-"Y lo somos"- me responde- "Pero tiene 17 tacos"

Y es cierto. Ya no me acordaba de lo que es ser adolescente. Es la época en la que solo confías en tus amigos y el resto del mundo no cuenta para nada. 

El ejemplo más claro esta en la famosa serie de Netflix "Por 13 razones", con los padres tan accesibles y comprensivos que tiene Hanna, y lo bien que se llevan... no es capaz de comunicarse con ellos ni contarles lo que está pasando en su vida. Es como si los padres, la familia, y los tíos "guays" pertenecieran a otra dimensión totalmente distinta a la que vives con tus amigos. 

Pasados los años, cuando uno madura, parece más fácil combinar los dos mundos, y llegas a unirlos como dos ondas que por fin se alinean, como una cuerda de guitarra bien afinada. 
Supongo que la vida consiste en eso...ir afinando la guitarra hasta que tienes todas las cuerdas en su sitio.

Si para mi ya es difícil y doloroso sentir ese alejamiento por parte de mi sobrina. ¿Cómo debe ser para los padres? 
La mayoría estarán sumidos en sus propias preocupaciones y no se darán cuenta de la distancia emocional que tienen con sus hijos. 
Para los que si se dan cuenta, paciencia. No intenten retenerlos. Un día volverán.

A mi sobrina no le voy a decir nada. Y conociéndole, ella tampoco me sacará el tema. Pero definitivamente no quiero que tenga que bloquearme cada vez que quiera publicar algo. Quiero que sea libre y tenga total privacidad. Habrá que cruzar los dedos para que pase por esta etapa sola y sobreviva. En cualquier caso, ninguno de nosotros podrá convencerle de que tome otro camino más que el que ella decida.
Ya no podré ver nada de lo que ponga en su Instagram porque he dejado de seguirle (desde mis dos cuentas).