domingo, 19 de febrero de 2012

Found it!


Solo un pequeño post para contar que estamos participando en un juego de la caza del tesoro a nivel mundial. No tenía ni idea de que podía existir algo así.
Ayer fuimos a Xátiva de excursión con Elena y Jose, y buscando, buscando, sin mucha esperanza, encontramos (con algo de dificultad) uno de los tesoros.
Hoy Bartek y yo nos levantamos con ganas de mas y seguimos la brújula hasta el siguiente escondite que resultó estar en un lugar del centro de Benicassim donde nunca antes habíamos estado. ¡Lo encontramos! Y con él, unas vistas preciosas.

jueves, 16 de febrero de 2012

Sherlock Holmes y las traducciones erroneas


Recientemente y debido a una nueva serie de televisión, me he encontrado fascinada por el papel de Sherlock Holmes.
En mi estantería está la obra completa de Sir Arthur Conan Doyle, que me leí a los 15 años y que en esa época no llegó a causarme una gran impresión. Los volúmenes en imitación de piel con letras doradas parecen una auténtica joya, y sin embargo ahora solo quiero tirarlos por la ventana. ¿Por qué?
La razón es algo complicada... a ver si puedo explicarme.
Con 15 años, siendo una ávida lectora con ganas de descubrir nuevos mundos, conseguí esta colección y la leí quedándo algo decepcionada ya que la lectura no me resultó nada fácil.
Ayer, después de bajarme "Estudio en Escarlata" en el inglés original, y después de leer el primer capítulo ¡me encantó! Y deduje que a los 15 años quizás no estaba preparada para leer sobre cadáveres, asesinos y pruebas químicas. Pero entonces, mi atracción por el papel hizo que desempolvara el primer volumen de las obras completas y comenzara desde el principio a leer en español ese mismo capítulo. ¡Y ahora lo entiendo! ¡Menuda traducción de m**rd*! La prosa está muy poco cuidada, y las palabrejas y expresiones utilizadas hacen que la lectura se haga complicada y aburrida. ¡Menudo tostón! Y ahora estoy enfadada, porque esta maldita editorial, y su traductor hicieron que yo con 15 años no disfrutara de una merecida lectura. No me emocioné como debía, y no conocí a Sherlock debidamente, a una edad en la que dicho encuentro hubiera supuesto el triple de entusiasmo del que soy capaz ahora. ¿No es terrible? ¿Privar a un adolescente de una lectura que podría haber marcado su vida?
La próxima vez que pongamos la estufa de leña, alimentaré el fuego con las obras completas de Sir Arthur Conan Doyle de ediciones ORBIS S.A. traducción de Armando Lázaro Ros.
¡Y que Dios bendiga a los traductores decentes!