lunes, 27 de octubre de 2014

Una más

Es un poco putada saber que estas leyendo esto. Dejo de sentirme sola cuando escribo, dejo de escribir sólo para mi. Ahora mismo quería contar la mierda de día que he tenido. Una puñalada más del destino. Empiezo a encajar bien los golpes. Cada vez duelen menos y sólo siento un poco de amargura en el estómago. Me viene bien escribir sobre ello, pero no quiero ir de víctima, no quiero ser una persona débil de lágrima fácil a la que tienen que consolar. Así que ahora que se que no estoy sola, no contaré nada, y sólo hablaré de cosas bonitas. Me guardaré lo malo dentro y lo mantendré escondido, aplastado y encogido, intentando que desaparezca.

lunes, 20 de octubre de 2014

La fuerza de la potencialidad

Echo de menos ser estudiante. Pero aunque pudiera volver a la universidad, ahora ya no sería lo mismo. No tendría la energía, la esperanza, la inocencia de entonces. La sensación de libertad y de irresponsabilidad. No tendría la comida preparada al llegar a casa. No tendría todo el tiempo del mundo para dedicarme a descubrir el mundo.
Ese tiempo pasó.
Ya tengo ganas de acabar con este hilo de vida que no me esta trayendo ninguna satisfacción, y empezar uno nuevo. Pero como no recordamos las vidas anteriores, no podré valorar en ese momento, lo fantástico que es volver a ser un "alguien en potencia"

jueves, 16 de octubre de 2014

Excusas y dimensiones paralelas

"Estoy pasando por un mal momento"- ¿Cuántas veces lo he oído ya? El mismo recital cada vez que me gusta alguien, esa frase la he oído tantas veces, que si mi vida fuera una serie, tacharían al guionista de repetitivo y poco original.
Madre mia! Tengo el don del oportunismo que siempre aparezco en la vida de los demás en momentos complicados en los que por norma general siempre hay una exnovia por ahí rodando. 
Y me pregunto si existe de verdad un mundo paralelo en el que pillo a esas personas fuera de esas etapas difíciles, sin conflicto ni barreras. Hubiera funcionado lo nuestro en esa dimensión?
Pues no. Porque yo creo que si de verdad te gusta alguien no existen barreras para estar cerca de esa persona. No hay excusa posible ni complicaciones lo suficientemente grandes que puedan alejarte de ella.  

miércoles, 15 de octubre de 2014

De coches y chinches

Hoy mi coche me ha dejado tirada.
La sensación que se te queda es muy curiosa: "¿Y ahora qué?"
Sentada en el asiento, intentando una y otra vez arrancar, y esperando que de un momento a otro el milagro suceda y escuchar el ruido del motor en marcha...
Pero no. Y después de un rato sin saber que hacer, cierras el coche y haces lo correcto. Llamas a la oficina para informar de que llegas tarde y pides un taxi. Pero... ¿hay taxis en este pueblo?
Gracias a Dios si, en internet encuentro un número y después de esperar 10 minutos un señor mayor en un mercedes azul se para y me pregunta si soy yo la que va a Onda.
Durante el viaje me habla de su vida en un castellano tocado con el acento del idioma autóctono, que ya no me atrevo ni a llamar dialecto.
Intenta tranquilizarme y me dice que hay muchos talleres en la zona, pero alguno bueno... no me lo puede asegurar. ¡Pues menuda tranquilidad!

No se por qué estoy contenta.

LLevo un mes de malas noticias. Primero invasión de pulgas en casa. La guerra casi acaba conmigo, he tenído momentos de histéria y me he puesto a llorar como una idiota porque no podía ver a los cabrones hijos de puta que me estaban mordiendo todo el cuerpo.
Pero tiramos una bomba como la de Hiroshima, y desde entonces no me han vuelto a picar.
El coche ya me dió problemas la semana pasada, llegamos a IKEA dando un concierto de chirridos. Me cambiaron las pastillas de freno, y aun seguía haciendo un ruido raro que estaba pendiente de mirar. Ahora no arranca.
En el trabajo cuchichean porque desde que he entrado he desmejorado mucho. No en el rendimiento, porque no paran de elojiarme, sino en el aspecto. El de recursos humanos le preguntó a mi compañera Antonia si me pasaba algo ¿Dónde está la chica que entrevisté hace 4 meses? Y sin embargo, la vida es así... a veces me da por llorar, y hoy estoy bien. A pesar de todo.
Quizás las adversidades me hacen fuerte.

Solo a veces...

sábado, 11 de octubre de 2014

En el fondo...

Y en el fondo, todas queremos ser princesas.