Y siguiendo con mi obsesión con las series de televisión, llevo algo mas de una semana sumida en el mundo de Alison Mundy y sus espíritus.
La serie en español se llama "Las voces de los muertos" y su título original algo más poético "Afterlife".
Ya se sabe como es eso de engancharse a una serie, al final los protagonistas llegan a ser parte de la familia.
Empecé a verla el año pasado cuando la hacían después de "Medium" con Patricia Arquette. En principio me parecía la versión gris y dramática de la serie americana, muy gótica, muy inglesa... Luego me enganché de mala manera. Han empezado a emitir la segunda temporada, pero yo ya la he visto toda de un tirón en internet.
Los personajes son muy humanos, sobretodo los dos protagonistas, Alison y Robert. Las excentricidades de la medium resultan tan ridículas que parecen reales, y no se puede sino sentir simpatía por ella.
En realidad la serie está compuesta por dos temporadas de tan solo 14 capítulos en total, y el final es tan definitivo que no creo que puedan sacar una tercera temporada. Cada historia es independiente, pero están tan bien entrelazadas que me da la sensación de haber visto una larga película.
Al final lloré y lloré y lloré, tanto y tanto, que me dolió la cabeza durante un día entero.
El próximo miércoles hacen el tercer capítulo de la segunda temporada en CUATRO a las 12 de la noche.