martes, 9 de mayo de 2006

Horchata a la polaca


Mi familia política está de visita. Ha sido la escusa perfecta para ordenar y limpiar la casa, ahora está como los chorros del oro. Ojalá podamos mantenerla así mucho.
Hoy hemos estado en Valencia y les ha gustado. Sobretodo el mercado central. Cuando hemos llegado a la sección de pescado y se han encontrado con toda esa cantidad de puestos con anguilas vivas, cangrejos gigantes, besugos, doradas, caracoles de río... Se han emocionado. Bartek dice que para ellos es como ir a un museo. El tío Eduardo salío del mercado con las manos en la cabeza diciendo que se iba a volver loco de ver tanto "ryba" (pescado).
Luego hemos comprado unas muñecas con el traje típico de Falleras y yo me he comprado unas castañuelas. No he podido evitarlo, me traían muchos buenos recuerdos, y de repente necesitaba tocarlas otra vez, allí mismo y en este preciso instante. Quería oir el castañeteo de la madera y maravillar a mi publico polaco. Hice un TRACATRAN, TACATRAN, ellos gritaron: "¡Bravo!" y después guardé las castañuelas en la mochila para el resto del día.
Luego nos tomamos una horchata fresquita con fartons en uno de los mejores sitios de Valencia, entre la Plaza Rodona y la plaza de la Reina. Ummmmm.... horchata...
Catedral, Plaza de la Virgen, Torres de Serrano, Jardín Botánico, Museo de la cerámica y por supuesto EL CORTE INGLÉS, donde las señoras polacas se probaron una veintena de zapatos.
Es la primera vez que vamos a Valencia y no hacemos lo de siempre (Visitar Habitat, Fnac, Camper, la tienda de tés y el barrio chino) pero ha sido divertido descubrir otra vez la ciudad con los ojos de otra persona.
Ahora estamos muertos. Bartek descansa dormido en el sofá, y yo caeré dentro de unos minutos, justo después de acabar esta frase darle a "submit" y apagar el ordenador.