martes, 16 de septiembre de 2008

Septiembre

Septiembre ya no es lo que era.
Ahora relaciono este mes con noches de viento, auditorías y horas extra, holandeses por un tubo y visitas familiares.
Y además ayer empezó el curso escolar. Bartek se despidió diciendo: "Hasta el sábado" y es que entre el trabajo y la escuela no le voy a ver el pelo entre semana. Que ganas tengo de cambiar de vida.
Eva la gata vive con nosotros. Se me habia olvidado lo que era tener un bicho en casa. Que bonito cuando se te sube encima y empieza a ronronear, y que desesperante cuando empieza a correr por la casa pegando brincos por todos los muebles y a perseguir moscas imaginarias por las paredes. He tenido que cubrir el sofá con mantas para que no me lo destroce.
El otro día llegaron Kris y Annia y directos del aeropuerto nos fuimos a Valencia. Hacía mucho que no paseaba por la calle Colon, y como siempre, al entrar en el Fnac me golpeó una sensación de bienestar. Paso corriendo la zona de nuevas tecnologías y me voy directa al primer piso. Me gustaría plantar una tienda de campaña y vivir allí, entre las sección de idiomas y las novelas de ficción. Y luego tampoco es que lea tanto, pero soy una fetichista sin remedio y me gusta estar rodeada de papel.
Acabé comprando lo nuevo de Paul Auster (autor de masas por lo que veo) y una nueva gramática polaca.
Este fin de semana nos vamos a Barcelona. No se si llegaremos vivos en el corsa.
¡Que ganas de que llegue Octubre!