Los de Villarrobledos pueden estar contentos, los conciertos del Viña Rock de ayer por la tarde han estado pasados por agua, a parte de que no había sitio para alojar a todos los campistas que han venido, y han acabado acampando en el río seco con gran peligro de naufragar. Esta mañana cuando me he levantado el paisaje desde mi ventana era deprimente. Caravanas, coches y tiendas haciendose un hueco entre el agua. Al final han tenido que desalojarse muchos de los coches porque se hundían. Aun no se sabe si los conciertos de esta tarde se cancelarán. Si sigue lloviendo así parece lo más probable. Muchos dirán que es un castigo merecido a la organización por trasladar los conciertos a Benicassim, la tierra del sol.