jueves, 25 de abril de 2013

Spiderwebs


Me imagino que ya he hablado mas de una vez sobre mi teoría del bucle de la ambición según generaciones.
Lo veo continuamente a mi alrededor, padres que se han labrado una parcela de éxito, han conseguido que sus hijos sean unos perfectos inútiles dándoles todo aquello que les piden. Al no haber tenido nada en su vida, los padres quieren lo mejor para sus hijos, y lo único que consiguen es inculcar una falta de valores a sus vástagos que los llevarán de cabeza al fracaso. De ellos nacerán hijos que lo tendrán difícil para sobrevivir en la vida ya que sus padres faltos de ambición, no les han dejado nada. Con lo cual lucharán (en general) y conseguirán labrarse su parcela de éxito, volviendo al bucle una y otra vez.
Yo me considero de la generación falta de ambición, falta de decisión y falta de coraje. Mi padre ha cultivado amistades, favores, contactos, y nos ha dado un camino limpio y despejado de problemas por el que caminar en la vida. Ahora, viéndonos llegar a la cima de nuestra vida adulta, me pregunto si está orgulloso de nosotros. Sus hijos son felices, cada uno a su manera, en sus ordinarias y modestas vidas, pero me imagino que él hubiera deseado ser padre de unos triunfadores sociales, gente importante a la que la gente respeta y admira por sus exitos.
Pero... no ha podido ser. Lo siento por él, aun sin saber... si realmente le importa.
La vida está llena de trampas y telas de araña, y yo he decidido elegir el camino despejado.