Ayer pasaron muchas cosas.
Organizaban un maraton en honor de Santa Claus, asi que todos los participantes llevaban un gorro rojo. Los amigos de Bartek corrian, asi que fue a hacerles fotos cuando pasaban por el bosque que hay cerca de nuestra casa. Gracias a Dios fue un dia bastante soleado porque debe ser horrible correr tres horas entre nieve y hielo.
Lo que mas gracia me hizo es que por la tarde cuando fuimos a la ciudad, en la plaza principal, la estatua de Copernico llevaba un gorro de Santa Claus y un dorsal de la carrera con el numero 1. A esta gente si que les encanta las tradiciones!
De todas formas hay cosas buenas y cosas malas. Ayer tambien nos dimos cuenta en 3 ocasiones de que la gente de aqui no es muy amable, ni en las tiendas ni en las cafeterias. Faltan las ganas de servir y la alegria que he visto miles de veces en nuestro pais (ojo! no siempre, pero si que mas amenudo que aqui).
También vimos un perro persiguiendo a una paloma por toda la plaza, y acorralándola para matarla. El tío de Bartek asusto al perro y yo cogi a la paloma, que parecía que iba a estallar de agotamiento, y la puse en la ventana de un edificio para que no la molestaran mas. Cuando me di la vuelta, una senyora había cogido la paloma y se la llevaba a casa para curarla, supongo.
Nos fuimos a Niebo ("Cielo" en polaco) que es un bar instalado en los bajos de un edificio antiguo. Suele haber muchos de ese estilo con los techos en bóvedas de piedra, como si fueran cavernas. Muy chulo, muy buen ambiente, y buena música. Cuando pedi una Heinecken, me sacaron una botella de MEDIO LITRO! Estos polacos cuando van a beber, lo hacen de verdad! Parecía que fueran las 9 o las 10 de la noche, pero cuando mire el reloj eran las cinco. La luz aquí me distorsiona los esquemas.
Me gusto el Niebo, y pensé que seria estupendo estar de erasmus en esta ciudad e ir allí de copas.
Por cierto, que la universidad esta en pleno centro, y es enorme. Curiosamente esta justo en frente de la cárcel, que es un edificio redondo con montones de ventanas con cristales semi opacos que dejan ver las sombras de los presos intentando mirar afuera. Bartek me contó que muchas veces se ve gente en la calle hablando por signos con los de dentro.. Parece ser que han inventado un lenguaje especial.
A mi la cárcel me pareció reducida, Mariusz me dijo que la mayoría de los ladrones están fuera.
