Hoy ha sido el cumple de mi padre, y nos ha invitado a comer al Bocadi.
No se si era porque tenía hambre o que, pero la comida me ha parecido espectacular. Boquerones fritos, morcilla, mejillones, jamón y queso, choricitos al vino y una dorada a la espalda de caerse de culo.
Una delicia.
Y encima en buena compañía, porque hemos estado muy agusto.
Las niñas, que ya son unas mujercitas, se han portado muy bién y no han interrumpido en las conversaciones. A mi padre le han gustado los regalos y luego he tenido el placer de llevar a mi tía a su casa ¡En coche!
Por la tarde hemos dado un paseo con Kelo, y hemos repetido Voramar, ya que esta mañana ya fuí con él a desayunar al sol.
Hoy ha hecho un día de auténtica primavera, y es que somos unos privilegiados.
Nos hemos encontrado con J.M., Inma y su Marina y nos hemos parado a charlar.
Un gato callejero se ha dejado acariciar un rato.
Mi primer día de vacaciones toca ya casi a su fin, aunque se ha chafado un poco al final... pero no quiero hablar de ello.
